FRANCISCO REYES / TORONTO /
“Canadá siempre ha tenido un criterio político muy independientes en los temas sobre la revolución cubana y lo ha hecho desde la perspectiva del respeto a los pueblos”. Con estas palabras, el diputado Juan Carlos Rodríguez Díaz, miembro electo de la Asamblea Nacional del Poder Popular en Cuba, destacó las relaciones diplomáticas entre Cuba y Canadá, basadas en el respeto mutuo, la solidaridad y la cooperación internacional entre ambas naciones.
Ante un numeroso grupo de simpatizantes por el pueblo cubano, como parte de una gira de dos semanas por ciudades canadienses desde Halifax hasta Victoria para hablar del ‘funcionamiento de la democracia y el sistema electoral’ en la isla, Rodríguez Díaz aprovechó la ocasión de celebrarse en este mes de marzo el 143 aniversario del establecimiento de las relaciones Cuba-Canadá, iniciadas en 1845.
El historiador y profesor de la Provincia de Pinar del Río hizo un recuento ante los participantes, que no cesaban de hacer preguntas, sobre los golpes de Estado que desde 1905 se suscitaron en el escenario político del país, tras procesos electorales viciados con el apoyo de los Estados Unidos, que “inevitablemente desembocaron en el triunfo la Revolución Cubana de 1959, para bien del país”.
Enfatizó que las decisiones de la Asamblea Nacional descansan en el poder del pueblo, con la participación de los vecindarios, las federaciones de agricultores, obreros, profesionales, mujeres y estudiantes, respectivamente, que escogen democráticamente a sus representantes a cargos políticos.
“Ninguno de ellos recibe dinero por sus servicios y no hacen campañas electorales como en otros países. Sus nombres y sus biográficas son colocados en pancartas públicas para que los votantes sepan quiénes son los candidatos”, dijo.
Al referirse a Canadá, que nunca ha interferido en los procesos políticos de esa nación, recalcó que “este país ha mostrado preferencia especial” por Cuba “comprobada a lo largo de 143 años de relaciones diplomáticas ininterrumpidas”.
“Canadá siempre ha defendido a Cuba de las agresiones de otras naciones poderosas. Ha votado sistemáticamente contra el bloqueo. Fue el único país que no rompió relaciones con Cuba, a pesar de las presiones norteamericanas, dando muestra de decisiones propias como nación multicultural que actúa con independencia en el escenario internacional”, declaró a la prensa.
Las relaciones entre Cuba y Canadá se hicieron más visibles durante los dos periodos de gobierno del ex primer ministro Pierre Elliot Trudeau, entre 1968 y 1984, quien las amplió con una visita oficial a la isla, en enero de 1976, siendo recibido por más de 250 mil personas en las calles.
Tan armoniosas fueron las relaciones bilaterales en ese período que, como paga por tan sólida amistad, el fenecido jefe del Estado cubano, Fidel Castro, en octubre del 2000 estuvo presente en los funerales del ex mandatario canadiense, padre del actual primer ministro Justin Trudeau.
Resaltó que, tras el bloqueo impuesto por la Casa Blanca en 1962, “Canadá mantuvo una postura solidaria” desestimando “la decisión criminal contra el pueblo cubano y manteniendo relaciones económicas con Cuba”.
Añadió que ha sido muy significativo el voto sistemático de Canadá contra el bloqueo, “produciendo fisuras a la política de Estados Unidos en sus pretensiones de crear la división interna en el pueblo cubano”, que siempre emite su voto de condena a la Casa Blanca. También ha estado en contra de otras resoluciones propuestas por ese país en la ONU y la OEA, para aislar a Cuba de geopolítica del hemisferio, manifestó.
No obstante tener Canadá un sistema político muy diferente, las relaciones entre ambos países son cada vez más fuertes y se distinguen “porque Cuba es un destino atractivo para los canadienses”, subrayó.
Se refirió a que más de un millón de turistas procedentes de Canadá visita anualmente las playas de la isla caribeña, dejando beneficios en billones de dólares, con los que han podido resistir los períodos especiales, como el que se produjo tras la desintegración del eje soviético, mayor soporte de Cuba para contrarrestar los efectos del bloqueo.
Agregó que Canadá está entre los cuatro socios económicos más poderosos que tiene Cuba. “Las inversiones canadienses en el turismo, la agricultura, la explotación minera y otros sectores económicos son bien acogidas por el Estado cubano por ser equitativas, beneficiando a ambas economías”.
“Tiene, además, inversiones en el petróleo y es uno de los grandes consumidores del níquel y el ron de Cuba, lo que demuestra que no se sometió a decisiones extraterritoriales que realmente no debieron tomarse nunca, pero se mantienen activas en perjuicio de nuestro país”.
Expresó su agradecimiento a las organizaciones canadienses que han mostrado su solidaridad con Cuba, sobre todo, por las ayudas prestadas tras el paso del Huracán Irma el año pasado. Destacó que en la canalización de la ayuda jugó un papel importante la cónsul general de Cuba en Toronto, Tania López Larroque.
Por su parte, Yamil Martínez Marrero, representante oficial del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), con sede en la Habana, al servir de interprete al diputado Juan Carlos Rodríguez Díaz dio a conocer una jornada de trabajo que próximamente realizará en Canadá, la “Brigada Ché Guevara de Trabajadores Voluntarios de Cuba”, del 22 de abril al 6 de mayo, en la que los jóvenes hispano-canadienses pueden integrarse, a través de la Asociación de Amistad Canadiense-Cubana de esta ciudad, organizadora de la conferencia del pasado miércoles 21.