OSCAR VIGIL / TORONTO /
Fue amor a primera vista, asegura. Nada más vio la caratula del CD y se enamoró del cantante de origen inglés George Michael. Tenía apenas ocho años de edad, y ese embrujo que el artista produjo sobre ella la llevó a aprender la letra de todas sus canciones, en inglés, sin entenderlas primero, y luego a hablarlas coloquialmente.
Así aprendió inglés Neesa Medina, sin escuela, únicamente bajo el tutelaje de las canciones de George Michael, un aprendizaje que años después le ha servido de una forma invaluable para defender los derechos de las mujeres más allá de su querido país, Honduras.
La semana pasada estuvo de visita en Canadá para hablar del tema que le apasiona: los derechos humanos y particularmente los derechos de las mujeres. Lo hizo en Toronto, en Montreal y en Ottawa, ante diputados federales, funcionarios de gobierno, sociedad civil canadiense y obviamente también ante la comunidad hispana asentada en este país.
En Toronto, auspiciada por Cuso International, participó en el Global Citizens Forum 2017, donde fue parte de un panel en el que se contaron historias y ella contó historias sobre los movimientos de resistencia y de alianzas en su natal Honduras.
“Para mí, una de esas historias fue cuando me descubrí feminista, en el proceso del golpe de estado en honduras en el año 2009, y lo logré hacer no de inmediato, sino que me tomó dos años”, dice, agregando que antes del golpe ella era parte del movimiento estudiantil de la Universidad Autónoma de Honduras, la universidad pública, pero que justo cuando sucedió el golpe estaba terminando sus estudios y se acercó la organización Centro de Derechos de Mujeres.
“Comencé a trabajar ahí y me di cuenta que las luchas no se pueden llamar igualitarias sino estamos incorporando a todos los sectores, y cómo a través del feminismo y de las estrategias del feminismo podemos incorporar no solamente a mujeres, sino reconocer también las otras formas de represión que usualmente terminan excluyendo a muchos grupos de los procesos sociales”, explica.
Neesa Medina se declara feminista sin ambages, pero aclara que el feminismo no facilita la vida, sino que la complejiza un montón. “El feminismo sigue siendo muy mal visto en general en América Latina, sigue siendo visto como algo divisorio de los movimientos en las sociedades, pero es porque toca los privilegios, y es muy difícil tocar privilegios y reconocer que hay una cuota de responsabilidad de quienes se han beneficiado de estos privilegios, de que las mujeres no hablen o que no existan en estos espacios, y por eso siguen siendo como un término al que muy poco se llega o se respeta. Hay una concepción errónea de que el feminismo es conflictivo o divisorio o anti hombres, y el feminismo es la búsqueda de igualdad a través de reconocer que las mujeres han sido excluidas”, explica.
A Canadá vino precisamente a hablar de eso, porque una de las ganancias del espacio de interrelación e interconexión entre diferentes países y puntos de vista es que se puede aprender que hay mucho más en común de lo que se cree, que, aunque los contextos de Honduras y Canadá sean muy distintos, existen siempre grupos de personas que van a estar buscando una mejor sociedad, expresa.
En ese sentido, dijo que particularmente a los ocho parlamentarios federales con quienes se reunió separadamente, les hizo notar tres prioridades que el gobierno de Canadá debería compartir con la población hondureña:
La primera es la violencia contra las mujeres en Honduras. “Debe mantener eso como una agenda dentro de las relaciones internacionales, como una exigencia entre las relaciones entre gobiernos, una exigencia al gobierno de honduras para disminuir la violencia contra las mujeres”.
La segunda, ayudar a garantizar el acceso a derechos sexuales y reproductivos. “Uno de los enfoques del gobierno canadiense actualmente es los derechos sexuales y reproductivos, y después de que el gobierno de Donald Trump limitara los fondos internacionales para esto, y la reacción automática del gobierno de Canadá fue incrementarlos, me parece un muy buen camino hacia contrarrestar estas brechas que existen”.
La tercera, “Mantenerse alerta de la situación de los defensores y defensoras de derechos humanos en Honduras, ya sea quienes defienden el ambiente, los ríos, las comunidades indígenas, las mujeres, los sindicatos, etc.”.
Estos temas son de vital importancia para la población hondureña, dijo Medina, y por lo tanto pidió, tanto a las autoridades canadienses como a la población en general, que brinden su aporte para mejorar la situación de los derechos humanos en el país centroamericano.
Neesa Medina es una socióloga feminista hondureña que actualmente trabaja como Analista de Seguridad y Género en el Centro de Derechos de Mujeres. A nivel nacional, participa en foros sobre violencia contra la mujer organizados por la sociedad civil, así como en varios paneles sobre reformas al Código Penal para proteger a las mujeres. A nivel internacional, ha participado en varias conferencias como ponente y ha presentado el Informe Alternativo al Comité de las Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW).
Para más información se puede visitar el sitio web www.derechosdelamujer.org