No más entrada a través de los puntos ciegos en la frontera entre Canadá y los Estados Unidos

Por Vilma Filici

filici@filici.com

TORONTO. Durante la reciente visita del presidente de los Estados Unidos a Canadá, Joe Biden, y en la reunión que sostuvo con el Primer Ministro Justin Trudeau, ambos mandatarios llegaron al acuerdo de ampliar y fortalecer el Tratado del Tercer País Seguro que Canadá y los Estados Unidos mantienen vigente en temas migratorios desde al año 2004.

El punto más importante en el que se pusieron de acuerdo es que a partir de ahora, absolutamente en toda la frontera entre ambos países, la cual se conoce como la Frontera Norte, el Tratado del Tercer País Seguro va a ser efectivo. Es decir, que no importa por donde quiera cruzar la gente, no lo va a poder hacer. Es decir, que cualquier persona que trate de entrar por puntos ciegos como el famoso Roxham Road va a ser regresada a los Estados Unidos, porque van a encontrar que ya no son elegibles para pedir refugio en Canadá dado que están viniendo por tierra desde los Estados Unidos.

La misma situación va a aplicar también para las personas que se encuentran en Canadá y que quieran cruzar hacia los Estados Unidos para pedir refugio allí. No lo van a poder hacer porque ya no hay ningún punto en toda la frontera donde el Tratado del Tercer País Seguro no aplique, tal y como era antes de que se pusieran de acuerdo el presidente Biden y el primer ministro Trudeau el fin de semana.

Lo que sucedió en dicha reunión es muy interesante porque Canadá ha estado tratando de hacerle cambios al Tratado del Tercer País Seguro desde el 2015, y no se había logrado hasta ahora con esta visita de Biden a Canadá. Y la razón por la que finalmente se ha logrado cambiar dicho tratado es porque tanto el gobierno de los Estados Unidos como el gobierno de Canadá han estado teniendo mucha presión de los partidos de oposición para que se controle la entrada de refugiados a través de dicha frontera. De hecho, los Estados Unidos había enviado 25 oficiales a tratar de controlar a la gente que buscaba entrar desde Canadá hacia los Estados Unidos para pedir refugio allí.

Tenemos que recordar que dentro del Tratado del Tercer País Seguro hay excepciones, debido a las cuales hay personas que van a poder seguir entrando y pidiendo refugio. Estas son las cuatro excepciones que existen: La primera excepción es para refugiados que se encuentran los Estados Unidos, quieren cruzar por tierra para pedir refugio y tienen un familiar o un pariente en Canadá. Este familiar puede ser un padre, hermano, esposa o esposo, hijos, sobrinos, sobrinas y tíos que se encuentren en Canadá con cualquier tipo de estatus, ya sea como visitante o como solicitante de refugio, o como residente permanente, ciudadano, con permiso de trabajo, con permiso de estudio, etc. Si el pariente no tienen ningún estatus, entonces no sirve como Pariente Ancla (Anchor Relative) para que puedan pedir refugio.

La segunda excepción es para jóvenes menores de 18 años que se encuentra en Estados Unidos, ellos pueden pasar y pedir refugio. La tercera excepción es para personas que vienen de países que no requieren visa para entrar a Canadá, y en los países del sur tenemos a México y a Chile, estos son los únicos países que no requieren visa para ingresar a Canadá. La cuarta excepción es por política migratoria y es para personas que corren riesgo de tortura o de ser asesinados si son regresados a Estados Unidos y Estados Unidos los envía a sus países de origen. Estas personas todavía pueden, sobre la base de esta excepción, presentarse en cualquier puerto de entrada y entrar a Canadá y pedir refugio.

Este cambio al tratado entró en vigor a partir del sábado 22 a la medianoche, es decir el mismo día en que fue acordado por los dos mandatarios. Y ahora eso significa que cualquier persona que llegue a Roxham Road o a cualquier otro puerto de entrada al país y que no cumpla con una de las cuatro excepciones establecidas, no la van a dejar pedir refugio. Es decir, los van a encontrar que son inelegibles para pedir refugio, porque cualquier persona que pide refugio en Canadá tiene que pasar por dos entrevistas, una es la de elegibilidad y la otra es de admisibilidad, y en la de elegibilidad hay una sección que tiene que ver con si la persona está entrando desde Estados Unidos por tierra, y entonces, al encontrar que no son elegibles los van a regresar a Estados Unidos.

Toda la idea de este cambio es que Estados Unidos los va a aceptar nuevamente. Sin embargo, el temor que tienen las organizaciones que trabajan con refugiados es de que al cerrar la frontera completamente para los solicitantes de refugio, ellos van a encontrar otras maneras de entrar a Canadá, porque sabemos que cuando las personas se encuentran en situaciones desesperantes toman medidas desesperantes, y eso implica, como ya lo hemos visto en el pasado y muchas veces, que van a arriesgar sus vidas para poder entrar a Canadá.

Porque ya ha sucedido. Hay gente que ha entrado por los campos de Manitoba durante el invierno y han perdido sus extremidades, manos y pies, porque se congelaron, tuvieron “frostbite”. Hay personas que murieron congeladas. Hemos visto también muchísimas personas que han muerto tratando de cruzar el río, entonces ese es el temor que se tiene, que las personas de todas maneras, ante las situaciones que están viviendo, van a buscar la forma de llegar a Canadá y que cerrando la frontera completamente, tal y como se ha hecho ahora, estamos poniendo a muchas personas en situaciones vulnerables y en riesgo.

Lo que se ha pedido desde hace mucho tiempo, desde el 2004, desde la implementación del Tratado del Tercer País Seguro, es que se elimine el tratado debido a que es inconstitucional, ya que una vez que los solicitantes de refugio son regresados a Estados Unidos luego de haber puesto pie en tierra canadiense, las personas son arrestadas y son maltratadas, por lo que Canadá está faltando a los derechos de estas personas que han pisado suelo canadiense en el marco de nuestra constitución política.

Tenemos un caso en estos momentos ante la Corte Suprema de Justicia, la cual tiene que definir si el tratado es constitucional o no. Y se espera que haya una decisión en algún momento este verano. Si la decisión es que si, que el tratado va en contra de la Constitución canadiense, entonces está la esperanza de que se cancele el tratado y volvamos a la frontera abierta para las personas que lleguen del sur. Si la respuesta es que no está en contra de la Constitución canadiense, entonces vamos a seguir con la frontera cerrada.

El consejo que yo les doy es que no crucen por puntos ciegos porque es peligroso, que busquen otra manera de poder salir de los Estados Unidos y de obtener la residencia permanente en Canadá. Hay muchos programas, además de los programas de refugio, que les permitirían a las personas poder llegar con su residencia permanente. Y también tenemos que considerar que existen los programas de reasentamiento por razones humanitarias que son para refugiados que se encuentran fuera de su país de nacionalidad o del país donde están siendo perseguidos. Pueden ser patrocinados por una organización comunitaria, por un grupo de cinco ciudadanos canadienses o residentes permanentes, o por el mismo gobierno canadiense.

Eso es algo que se podría explorar particularmente por las personas que tienen familia en Canadá ya que pueden buscar un grupo de cinco personas, que no tienen necesariamente que ser parientes, pero sí tienen que ser ciudadanos canadienses, residentes permanentes, mayores de 18 años, para que se haga este patrocinio.

Adicionalmente, en los próximos meses los refugiados que se encuentran fuera de sus países de origen también van a poder aplicar para su residencia en Canadá a través del Programa de Movilidad Económica (Economic Mobility Program) que fue anunciado esta semana por el Ministro de Inmigración, Refugiados de Ciudadanía de Canadá, Sean Fraser.

Este es un programa piloto para personas que se encuentran desplazadas fuera de su país, el cual va a permitir que empleadores canadienses puedan darle trabajo a esos refugiados que están viviendo en otros países, y quienes van a obtener la residencia en aproximadamente seis meses. Hay socios del Gobierno canadiense que están activamente buscando a estas personas de acuerdo con el talento que tengan. Pero deben tener el estatus de refugiados de convenio en otros países o caer bajo alguno de los programas de refugio alrededor del mundo.

En las próximas semanas ampliaremos la información sobre este nuevo programa, una vez que el Ministerio de Inmigración de a conocer los detalles completos del mismo.