OSCAR VIGIL / TORONTO /
Una chispa se encendió en Nicaragua y ha provocado un gran incendio. Ahora las llamas están llegando a prácticamente todo el mundo, incluida la ciudad de Toronto, donde varias decenas de canadienses de origen nicaragüense protestaron el fin de semana frente a las instalaciones de la Alcaldía Municipal.
La chispa que inició el descontento fue una reforma al sistema de seguridad social que reducía en un 5% las pensiones de los jubilados y aumentaba los aportes al sistema tanto de los trabajadores como de los patronos. La medida fue tomada de forma unilateral por parte del gobierno sandinista del presidente Daniel Ortega y contó con el inmediato rechazo de prácticamente todos los sectores del país.
Hasta el momento, de acuerdo con organismos defensores de los derechos humanos, 28 personas han fallecido a causa de disparos con armas de fuego, entre ellos un periodista que transmitía en vivo las protestas. Hay decenas de heridos y centenares de capturados por los cuerpos de seguridad.
En Toronto, la comunidad nicaragüense no se ha quedado pasiva en torno a los incidentes, y el fin de semana, poco más de 30 personas se hicieron presentes con banderas, carteles y vistiendo de azul y blanco, los colores patrios nicaragüenses, para protestar en contra de lo que ellos consideran es una ola represiva impulsada por el gobierno nicaragüense en contra de los protestantes.
“Estamos haciendo una demostración de apoyo a Nicaragua. Nosotros como nicaragüenses estamos manifestándonos en Toronto denunciando los crímenes, los asesinatos, el derramamiento de sangre innecesario a los estudiantes, la masacre que está realizando Daniel Ortega y su gobierno”, dijo Lidia Barrera, una de las asistentes a la demostración, y quien tiene 30 años de vivir en Canadá.
Dijo que el gobierno del presidente Daniel Ortega ha sacado a criminales de las cárceles para golpear y para asesinar, y que ha destruido la propiedad privada culpando a los estudiantes para justificar el uso del ejército.
“Eso es lo que estamos ahorita denunciando al mundo entero, y pedimos ayuda a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas, a los medios de comunicación, que se divulgue la situación y el genocidio y la masacre que está sucediendo en Nicaragua”, apuntó.
Los manifestantes en Toronto, entre quienes había bastantes jóvenes y niños, explicaron que el problema nicaragüense radica en que el presiente Daniel Ortega quitó y está reduciendo los beneficios de seguro social, “ese fue el inicio de las protestas, a raíz de eso los estudiantes fueron golpeados y ahí comenzó todo el problema, y ahora se está manifestando todo el pueblo a raíz de todo lo que ha sucedido”.
Según las informaciones provenientes del país centroamericano, esta es la protesta mas fuerte que ha enfrentado el gobierno del sandinista Daniel Ortega en los últimos años, quien gobernó Nicaragua tras el derrocamiento del dictador Anastasio Somoza en el año 1979 y que, tras una derrota sufrida en el año 1990 retomó las riendas del poder en el año 2007. La actual vicepresidenta de Nicaragua es la esposa de Daniel Ortega, Rosario Murillo.
Lidia Barrera dijo que el grupo de canadienses/nicaragüenses que protestó en Toronto lo hizo de forma espontánea, poniéndose de acuerdo a través de la vía telefónica y de las redes sociales, y explicó que están a la expectativa de lo que suceda en su país natal durante los próximos días para definir cuáles van a ser las siguientes acciones que van a tomar.
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