El gobierno liberal podría implementar programa de regularización para indocumentados

POR OSCAR VIGIL / TORONTO /

Un programa de amnistía para las personas que vivían de forma indocumentada en Canadá fue implementado en el año 1973 por el entonces primer ministro Pierre Elliott Trudeau. Casi 50 años después, su hijo, el actual primer ministro Justin Trudeau, está abriendo nuevamente la puerta para regularizar a las personas sin estatus en el país.

Esta posibilidad quedó abierta el 16 de diciembre pasado cuando el primer ministro Justin Trudeau le envió la “Carta de Mandato” (Mandate Letter) a su nuevo ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Sean Fraser, en la cual le establece las prioridades de su gobierno en materia migratoria para este nuevo periodo.

En uno de los puntos específicos de la carta, le ordena al ministro Fraser que “Aproveche los programas piloto ya existentes para explorar más a fondo las formas de regularizar el estatus de los trabajadores indocumentados que contribuyen a las comunidades canadienses”.

Aquí, el primer ministro Justin Trudeau se refiere a dos programas piloto que fueron implementados durante los últimos dos años, con los cuales se exploraron mecanismos para regularizar a números específicos de trabajadores indocumentados que viven en el país.

El primer programa fue dirigido a 500 personas que habían llegado con el programa de trabajadores temporales y que después de finalizado se periodo de trabajo legal se quedaron trabajando de forma indocumentada, y luego se implementó otro también dirigido a 500 trabajadores indocumentados pero esta vez específicamente del área de la construcción.

Los resultados preliminares muestran que ambos programas piloto fueron exitosos, por lo que se espera que con este nuevo mandato se establezca un nuevo mecanismo, muchísimo mas amplio, que pueda dar cabida a un alto porcentaje del alrededor de un millón de personas que actualmente viven de forma indocumentada en Canadá.

Otros de los puntos establecidos en el mandato piden agilizar los procesos migratorios en el país, así como también eliminar el costo del proceso de ciudadanía, que actualmente está establecido en $630.00