POR VILMA FILICI / TORONTO /
El año que acaba de finalizar fue un periodo bastante turbulento para la inmigración a Canadá, debido principalmente a los frecuentes y drásticos cambios implementados a la política migratoria del país, la mayoría de los cuales entran en vigencia precisamente este año 2014.
Empezamos el año con la reanudación del programa de patrocinio para padres y abuelos, a través del cual los ciudadanos canadienses y los residentes permanentes mayores de 18 años que cumplan con los requisitos establecidos por la ley van a poder nuevamente patrocinar a sus padres y abuelos.
No obstante, a partir de ahora solamente habrá un cupo de cinco mil solicitudes por año en este programa, y por lo tanto únicamente las personas que presenten primero su solicitud van a ser quienes podrán tener la suerte de patrocinar a sus progenitores.
De igual forma, los requisitos para poder hacer este patrocinio también han sido cambiados dramáticamente, y con los nuevos procedimientos una persona va a tener que ganar una suma bastante significativa de dinero para poder hacer el patrocinio. Aquí hay que considerar que cuantas más personas haya en la familia nuclear de quien está patrocinando, así como también de quien está siendo patrocinado, más dinero tiene que ganar el patrocinado. Estamos ha blando de cifras relativamente altas, lo que va a limitar que muchas personas de la clase trabajadora que tienen un salario mínimo puedan patrocinar a sus padres o abuelos.
También comienza a funcionar el sistema de responsabilidad extendida para aquellos que puedan patrocinar a sus padres o abuelos, ya que deberán hacerse responsables de ellos por un periodo de 20 años. Esto significa que los patrocinados no pueden recibir ningún tipo de asistencia social de parte del gobierno, dado que el patrocinador tiene que hacerse cargo de las necesidades básicas de ellos por un periodo de 20 años. Pero no hay que confundirse, porque sí podrán recibir lo que les corresponda en el momento que califiquen para las pensiones.
A finales del 2013 el gobierno volvió a reiterar que para el 2014 no va a haber cambios en término de los refugiados, es decir que no se les va a dar ningún tipo de beneficio de salud a pesar de todas las campañas que se han hecho a favor de ellos, particularmente por parte de los médicos y las personas que trabajan en el área de salud y con refugiados.
También, en el 2013 va a haber cambios significativos en el programa de Clase de Experiencia Canadiense, donde los estudiantes internacionales y las personas que están trabajando en Canadá con un permiso de trabajo otorgado por un Labour Market Opnion (LMO), o por alguno de los programas basados en los acuerdos internacionales que tiene Canadá con otros países, pueden solicitar la residencia permanente.
Aquí, a partir de este año habrá una cuota 12 mil casos al año, y por cada ocupación va a haber únicamente 200 cupos. Esto va a limitar a muchísimas personas que planearon su futuro de acuerdo a este programa, como por ejemplo a los estudiantes internacionales que vienen al país y gastan mucho dinero (porque pagan tres o cuatro veces más de lo que paga un residente permanente o un ciudadano canadiense) con el plan de estudiar, trabajar y luego hacer su trámite de residencia permanente para poder establecerse en el país, y en muchísimos casos también para poder luego patrocinar a sus familiares.
También, ahora hay ocupaciones que quedan fuera de la posibilidad de poder hacer el trámite de la residencia permanente a través de este programa, como por ejemplo cocineros, chef y oficiales administrativos.
Otro de los cambios a partir de este año es que ahora el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Social de Canadá va a tener el poder de revocar LMOs, es decir los permisos que se le dan a las compañías para que puedan traer trabajadores extranjeros. Esto lo podrá hacer cuando sospeche que el empleador ha mentido al momento de hacer el trámite, en cualquier momento, e implica revocar y también el permiso de trabajo correspondiente.
De igual forma, si hubiera cambios en las necesidades de las distintas industrias, el gobierno también puede decidir que ya no hay necesidad de tener trabajadores extranjeros en ciertas industrias y por lo tanto pueden revocar los permisos para que las compañías puedan contratar trabajadores extranjeros. Esto pone en peligro no solamente al trabajador que puede perder su trabajo sino que también pone en incertidumbre a las compañías que en muchos casos están dependiendo de estos trabajadores extranjeros para poder cumplir con sus contratos y responsabilidades.
También está en el tintero un proyecto de ley para hacer cambios a la ley de ciudadanía. Se está hablando de muchísimas propuestas que al gobierno le gustaría implementar, son muchas y muy variadas, como por ejemplo si se le otorga o no la ciudadanía a un niño nacido en el país ya que el gobierno cree que muchas personas vienen a dar a luz sin ninguna intención de establecerse en Canadá, solamente para asegurar la ciudadanía de sus hijos. Sin embargo, la consideración más importante es que quieren cambiar el tiempo que un residente permanente tiene que vivir en Canadá antes de poder hacerse ciudadano canadiense, y están manejando la idea de que una persona viva como residente permanente por cuatro años en un periodo de seis años para poder hacer su trámite para la ciudadanía.
El gobierno también está trabajando un nuevo programa de trabajadores calificados conocido como “Expresión de Intención”, que implica un cambio radical a la manera en la cual se procesan las solicitudes para residencia permanente para los trabajadores calificados. Esto se está trabajando para implementarlo en el 2015, y consiste en la creación de una especie de pozo común donde van a llegar las solicitudes y los empleadores van a seleccionar de ese pozo a los trabajadores que ellos consideren que pueden satisfacer las necesidades de las empresa.
En general, para el 2014 se puede ver que continuamos con la misma política migratoria que tuvimos en el 2013, aunque por supuesto a consecuencia de todos los cambios que ha habido en el 2013 ahora va a ser mucho más difícil obtener la residencia permanente y luego la ciudadanía canadiense. Pero esto no será imposible, sólo hay que analizar cada caso para ver cuál es el programa que mejor se adecua para cada persona.
Sin embargo, la diferencia hoy en día es que hay que actuar de manera rápida porque hay cuotas, sólo se procesarán números reducidos de solicitudes, y el resto se les regresará a los solicitantes sin siquiera abrir un expediente con Inmigración, a fin de que esperen la próxima tanda para presentar nuevamente sus solicitudes.
*Vilma Filici es una reconocida catedrática y consultora de Leyes de Inmigración radicada en Toronto
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