Corte Federal falla que tratamiento dado a refugiados de “países seguros” es inconstitucional

PaisesDesignados2015VILMA FILICI / TORONTO /
La semana pasada el gobierno de Canadá recibió dos reveses en materia migratoria, una a nivel nacional y la otra a nivel internacional. A nivel nacional el juez Keith M. Boswell, de la Corte Federal de Canadá, determinó que el tratamiento dado a los refugiados provenientes de países que se encuentran en la lista de países seguros, al negarles el derecho de apelar ante la División de Apelaciones de Refugiados, va en contra de la secciones 15 y 7 de la Carta de Derechos y Responsabilidades del Ciudadano (Charter of Rights and Freedoms). Los países de habla hispana afectados por esta lista son México, Chile y España.

A nivel internacional, un reporte publicado por el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas denunció la renuencia por parte del gobierno Canadiense a cumplir con las sugerencias del Comité con respecto a los cambios que se deberían implementar para cumplir con las responsabilidades del país en relación a diversos tratados de los cuales Canadá es signatario. Además enumera 15 áreas de preocupación, entre ellas el trato dado a los refugiados, los detenidos y la ley C 51.

En diciembre del 2012, con la implementación de la lista de Países Designados, se crearon dos procesos para los refugiados. Así, dependiendo del país del cual proviene la persona, el trato, el tiempo de procesamiento y las posibilidades de apelar una decisión negativa del Consejo de refugiados varían.

El caso ante la Corte Federal trata específicamente sobre las personas de Países Designados (países designados por el Ministro de Inmigración como países donde se respetan los derechos humanos y donde supuestamente no hay persecución).

Hay que recordar que antes de que se implementara este procedimiento era muy común escuchar al Ministro de Inmigración despotricar contra las personas que venían de ciertos países de Europa y también específicamente en contra de los mexicanos. Abiertamente el Ministro de Inmigración los acusaba de ser personas que venían a Canadá a aprovecharse de la bondad de los Canadienses, por lo que creó el Nuevo Sistema de refugio para “disuadir el abuso del Sistema de refugio por personas provenientes de países que son generalmente considerados países que no producen refugiados”.

El método usado fue negarles derechos fundamentales como la posibilidad de trabajo, de asistencia médica y la de agilizar los casos, casi quitándole al refugiado la posibilidad de preparar su proceso adecuadamente y negándoles el derecho a una apelación. El gobierno dijo repetidas veces que el nuevo proceso de refugio fue todo un éxito porque el número de solicitantes de refugio bajó en más de un 80 por ciento.

Pero la semana pasada la Corte Federal falló que el negarle la posibilidad de apelación a un refugiado basándose sólo en el país de origen de este, significa discriminación entre distintas clases de personas no ciudadanas basándose en el país de origen.

El Juez Boswell también dijo que el crear dos clases de refugiados, en dependencia del país del cual provienen los solicitantes, pone a los refugiados de países en la lista designada en desventaja al perpetuar el prejuicio y el estereotipo.

El Juez continuó su decisión diciendo “que el trato dado a los refugiados de países en la lista, aparte de sufrir desventajas en el procesamiento, también los marginaliza, los perjudica y los estereotipa como personas que vienen a saltarse la línea para entrar en el país o que son “mentirosos”, que sólo vienen a tomar ventaja del programa de refugio Canadiense y su generosidad”.

En este punto pareciera que el juez está hablando directamente acerca de las declaraciones dadas a los medios por el Ministro de Inmigración sobre los refugiados de México y otros países.

Atropello a los derechos humanos y discriminación son los temas que resaltan tanto en la decisión de la Corte Federal como en el reporte del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas. El reporte habla de la desigualdad y la violencia en contra de la mujer en Canadá, particularmente de la mujer aborigen.

También pide que el gobierno cese las detenciones de personas que son designadas como “Arribos Irregulares” (Irregular Arrivals). Esta es la etiqueta que se le da a cualquier grupo de dos o más personas que llegan de manera organizada a pedir refugio, y que constituyen un tercer grupo dentro de los grupos de refugiados que son discriminados y abusados al llegar al país. Le ley permite que estas personas sean detenidas al llegar, y pueden permanecer en los centros de detención por tiempo indefinido.

Si eventualmente son aceptadas como refugiados, estas personas deberán esperar cinco años antes de poder hacer su trámite de residencia, lo cual en sí es un abuso y discriminación, así como lo es el trato a las personas que vienen de países que son designados como países seguros.

En columnas anteriores que escribí cuando las leyes fueron aprobadas y luego implementadas, plantee la ilegalidad de estas medidas. De igual forma cuestioné la forma en que fueron aprobadas a pesar de que eran leyes que estaban en contra de la constitución nacional. También, en su momento dije que probablemente íbamos a sufrirlas durante un par de años pero que deberíamos confiar en los abogados que se especializan en derechos humanos y refugiados y en la independencia de las cortes. Y poco a poco estamos viendo cómo la mayoría de las leyes aprobadas por el gobierno, las cuales definitivamente estaban en contra la constitución, están ahora siendo derogadas por las cortes.

Más recientemente el gobierno conservador aprobó la Ley de Ciudadanía, la cual tiene secciones que también son ilegales. De igual forma tendremos que sufrirla por un par de años hasta que algunas de las personas afectadas negativamente apelen sus casos y estas legislaciones sean también derogadas. Podremos entonces celebrar la derrota de las leyes injustas y abusivas así como lo estamos haciendo ahora con la última decisión de la Corte Federal sobre los refugiados de países designados.

Pero hay que recordar que también tenemos la esperanza de que si hay un cambio de gobierno en las elecciones del 19 de Octubre próximo, el nuevo gobierno cambiará las leyes y se comportará de una manera justa y respetuosa de los derechos de los refugiados, de los derechos de los inmigrantes y de los derechos de los ciudadanos de este país.