OSCAR VIGIL / TORONTO /
Con una reunión de amigos que incluyó entrega de reconocimientos a instituciones y personas destacadas de la comunidad, el Consejo de Desarrollo Hispano, una de las instituciones comunitarias más importantes de la comunidad hispana radicada en este país, celebró sus 35 años de nacimiento.
El evento tuvo lugar en las instalaciones de Lula Lounge, en el centro de la ciudad, y al mismo acudieron dirigentes comunitarios, profesionales, empresariales y artistas que quisieron estar presentes en una celebración llena de nostalgia y de buenos augurios.
“Esta celebración es motivo de orgullo, es motivo de satisfacción y al mismo tiempo es un recordatorio que si estas organizaciones continúan existiendo es porque continúan existiendo las necesidades que fueron la raíz para que estas organizaciones nacieran y existieran”, dijo Juan Carranza, reconocido abogado de origen latinoamericano que actualmente funge como presidente de la organización.
Hizo notar que la comunidad está conformada por las diferentes oleadas de inmigración proveniente de los diversos países de América Latina que han llegado al país a través de los años, las cuales representan diferentes niveles de integración en el país.
“Las personas que llegaron acá en los años 60 no tienen el mismo nivel de integración que las personas que llegaron a finales de los 90, por ejemplo, y esto presenta cierto desafío, pero yo creo que la comunidad más y más se da cuenta de todas las cosas que nos unen. Siempre se pide la unidad, y en muchas cosa la comunidad está unida, como por ejemplo en esta organizaciones en particular que se han unido a través de los años”, aseguró.
El Consejo de Desarrollo Hispano fue fundado por un número de trabajadores comunitarios en 1978, buscando ayudar y cambiar la situación de desventaja que afectaba a la emergente comunidad Hispana de esa época. Y 35 años después, su aporte continúa ayudando a construir la comunidad.
Ana Paredes fue presidenta de la entidad durante nueve años a finales de la década de 1990 y principios del nuevo siglo, y asegura que la organización continúa vigente hasta nuestros días.
“Lo que ha cambiado es que tenemos 35 años de historia, tenemos comunidades nuevas, generaciones nuevas, hemos crecido, nos hemos desarrollado y tenemos un proceso increíble de desarrollo. Ha habido una serie de elementos importantes dentro de la esfera internacional, la globalización del desempleo, los cambios sociales, y por supuesto tenemos que adaptarnos a eso para poder ser efectivos en lo que estamos haciendo”, explicó.
En este sentido, dijo que la existencia de la organización durante estos 35 años ha sido trascendental para la comunidad, porque “ha sido un trabajo de bastante esfuerzo, ha sido un trabajo de perseverancia donde hemos tenido muchos retos, tanto como comunidad pero también en el aspecto de financiamiento, crecimiento, y los cambios que se han dado dentro del esquema socioeconómico de nuestra comunidad, así que se sigue trabajando y eso es importante”.
Como parte de la celebración, el CDH hizo entrega de reconocimientos a instituciones y personas que a través de los años se han destacados en relación al aporte que han brindado a la comunidad, entre ellos, homenajearon al Centro para Gente de habla Hispana, a Jane and Finch Community and Family Centre y a Fernando Valladares.
“Para mi es un orgullo el que instituciones con arraigo en la comunidad reconozcan, después de tantos años, el trabajo que uno hace. Me voy contento de que un poco de lo que he hecho en esta comunidad se reconozca, especialmente por nuestra gente. Porque nadie es profeta en su tierra, pero de vez en cuando es bueno que te den un empujón para seguir adelante’’, dijo Valladares.
Explicó que el desarrollo de las instituciones dentro de la comunidad no es fácil, dado que “somos de 20 países diferentes, somos una mayoría de minorías, y no hemos sabido reconocernos nosotros mismos”. Sin embargo, agregó que “la comunidad está haciendo un trabajo excelente, y va por el proceso que ha pasado la comunidad italiana, la portuguesa, y estamos llegando cada día un poquito más hacia donde deberíamos estar hace 20 años”.
Otro de los galardonados fue Duberlis Ramos, quien durante 22 años ha fungido como Director Ejecutivo de la entidad, y por tanto tiene en su haber gran parte de la historia institucional.
“Personalmente ha sido un muy buen desafío, pero por otro lado siento que hay frutos muy buenos en circunstancias críticas. Creo que he disfrutado de la solidaridad de nuestra comunidad, la cual a veces decimos que no tiene solidaridad, que no es unida, pero personalmente debo decir que yo he visto lo contario en los momentos duros, y eso para mí es un honor, es un placer es un privilegio”, aseguró.
Explicó que una de las tareas más duras a través de los años ha sido la sobrevivencia de la institución, pero agregó que gracias a l trabajo de todo un equipo a través de los años, hoy el CHC está llegando a un punto nuevo como comunidad.
“Estamos llegando a lo más significativo, como son estas colaboraciones que hemos comenzado a construir, y creo que esto marca el comienzo de una nueva etapa de crecimiento para la comunidad”, aseguró, en referencia al trabajo que conjuntamente están realizando con el Centro para Gente de Habla Hispana, el Congreso Hispano Canadiense y la Fundación Las Flores.
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Alejandro Morales (izquierda), junto con Gabriel Parada, dos de los más antiguos miembros de la Junta Directiva del CHC, fueron los encargados de entregar el diploma de reconocimiento “Consejo de Desarrollo Hispano” a Duberlis Ramos (centro)
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