El nuevo presupuesto ofrece miles de millones de dólares para atención dental, recortes de gastos y aumentos de impuestos para controlar el déficit
POR OSCAR VIGIL / TORONTO /
Todo indica que el gobierno minoritario del Partido Liberal sobrevivirá hasta el 2025, o cuando menos hasta que presente un nuevo presupuesto en marzo del 2024, porque hoy por hoy, con la presentación del actual presupuesto federal, los votos del NDP están asegurados, y con ello, la continuación de la alianza que realizaron en el 2022 conocida como “Acuerdo de Confianza y Suministro” Confidence-and-supply agreement).
Cualquiera diría que la ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, hizo malabares en el presupuesto federal que presentó la semana pasada, el cual proyecta un déficit de aproximadamente $10 mil millones más que el pronóstico inicial, un aumento que ha sido impulsado por el empeoramiento de la economía y por nuevos gastos en iniciativas como el programa nacional de atención dental acordado con el Partido Nuevo Demócrata (NDP).
Hay que recordar que ambos partidos acordaron estabilidad política para el gobierno minoritario liberal hasta el 2025 a cambio de la implementación de varios programas sociales, entre ellos el “Dentalcare”. Y estos programas sociales están reflejados y presupuestados en el presupuesto federal que fue presentado y alabado por el liderazgo del NDP.
El plan fiscal de la ministra Freeland proyecta que el déficit será de $40.1 mil millones en 2023-24, por encima de los $30.6 mil millones que dijo que sería el otoño pasado, pero se presenta como un plan enfocado para abordar la inflación y posicionar la economía para el futuro a través de créditos fiscales multimillonarios para estimular el sector de las energías limpias.
Entre los aspectos destacados del presupuesto federal se encuentran:
Un “reembolso de comestibles” único que proporcionará a las familias elegibles hasta $467. Las personas solteras sin hijos podrían recibir hasta $234 más.
Un aumento del 40 por ciento en las becas para estudiantes de Canadá.
Un plan de $13 mil millones para expandir la atención dental a familias que ganan menos de $90,000 al año.
Un nuevo crédito fiscal reembolsable del 15 por ciento para inversiones en electricidad limpia.
Un crédito fiscal reembolsable del 30 por ciento para inversiones en fabricación de tecnología limpia.
Recortes al gasto público.
Un impuesto sobre la recompra de acciones.
Para el Programa de Atención Dental: se destinarán más de $13 mil millones, incluidos $107 millones iniciales en 2023-24, durante los próximos cinco años para crear un nuevo plan de atención dental canadiense. La medida tiene como objetivo brindar cobertura dental a los canadienses sin seguro que tienen un ingreso familiar anual de menos de $90,000, sin copagos para aquellos con ingresos familiares de menos de $70,000. Se prevé que la nueva cobertura comience a fines de año y sea administrada por Health Canada.
Para el Reembolso del GST: El gobierno federal espera gastar casi $2,500 millones este año en una medida de asequibilidad denominada “reembolso de la tienda de comestibles”. El pago único duplicará el reembolso de GST para los canadienses elegibles. Es una repetición de la misma medida que los liberales introdujeron el otoño pasado con el apoyo del NDP, y nuevamente proporcionará hasta $467 adicionales para parejas elegibles con dos personas; $234 para canadienses solteros sin hijos; y $225 para personas mayores.
Para controlar el aumento de los déficits, la ministra Freeland propuso también una serie de aumentos de impuestos para las corporaciones ricas y grandes y recortes en el gasto público. En total, planea recortar unos 15,400 millones de dólares en gastos durante los próximos cinco años a través de “reducciones específicas”, incluido un esfuerzo para frenar el uso de “servicios profesionales” y consultores de gestión y una reducción en los gastos de viaje.