La ciudad anunció que hasta el martes se había vacunado ya al 65 por ciento de la población, llegando casi a 2 millones de dosis
POR OSCAR VIGIL / TORONTO /
Durante las últimas semanas ha sido impresionante ver el número de centros de vacunación que han proliferado en la provincia de Ontario y particularmente en las ciudades más pobladas como Toronto, Brampton y Mississauga, así como también las largas filas en dichos lugares, compuestas especialmente por jóvenes
Esas son sin duda señales de que la población esta respondiendo, y que confirman los resultados de una encuesta reciente que establecía que únicamente el 7 por ciento de la población canadiense decía que no se iba a vacunar, es decir menos de una persona de cada diez.
Así, los altos números de inmunización que se están dando, sumado a los efectos del cierre de actividades en la provincia que anunció el pasado 20 de mayo el gobierno conservador de Doug Ford, muestra que el virus esta perdiendo la batalla en la provincia.
El martes de esta semana Ontario reportó únicamente 1,039 casos de COVID-19 y 33 muertes, luego de haber reportado 1,446 casos el lunes, con lo que el promedio de siete días se redujo a 1,693 casos diarios, o 81 semanales por cada 100,000. En relación por las muertes provocadas por la enfermedad, el promedio de siete días también cayó a 21,3 por día.
La ciudad de Toronto reportó que el fin de semana alcanzó el 65 por ciento de inmunización con una dosis de los adultos en la ciudad, y que está muy cerca de administrar 2 millones de dosis.
“Hasta la fecha se han administrado 1,986,966 dosis de la vacuna COVID-19 en Toronto”, dijo la ciudad en un comunicado de prensa, agregado que dichas cifras no incluyen a los niños y adolescentes de 12 a 17 años que en los últimos días han sido inyectados con la vacuna Pfizer en toda la ciudad.
La Dra. Eileen de Villa, jefa de salud pública de Toronto, dijo que alcanzar el 65% es un hito increíble. “Eso es dos de cada tres adultos en la ciudad. Ese número habla no solo de los impresionantes esfuerzos del equipo de Toronto para vacunar a la mayor cantidad de personas lo más rápido posible, sino también del compromiso de la gente de Toronto”, explicó.
Por su parte, el alcalde de la ciudad, John Tory, dijo que la ciudad debe seguir aumentando esa tasa e hizo un llamado a quienes aún no han sido vacunados a que lo hagan lo más pronto posible.
“La gente debe recordar que el umbral para que la ciudad vuelva a abrir, y los umbrales para la buena salud en la ciudad, involucran a un porcentaje más alto de personas que las que tenemos hoy que se vacunan”.
Hay que recordar que la orden actual de quedarse en casa finalizará el 2 de junio, pero que las restricciones de cierre impuestas a una variedad de sectores se mantendrán hasta que comience la primera fase del plan de reapertura. Esto, no obstante que para el fin de semana se eliminaron las restricciones para la recreación al aire libre, lo que permite a los habitantes de Toronto jugar al golf, jugar al tenis y compartir con grupos de cinco o menos personas que no son de su familia.
De acuerdo con el plan de tres fases del gobierno provincial, la reapertura de Ontario comenzará hasta la semana del 14 de junio y dependerá del número de vacunas puestas así como también de la disminución de los casos de contagio.
En la primera fase se podrá ir a comer a los patios de los restaurantes, se abrirán parcialmente las tiendas minoristas no esenciales, así como también las piscinas al aire libre y los parques provinciales, donde podrán departir hasta un máximo de 10 personas.
Una segunda fase ocurrirá hasta que por lo menos este vacunada con una dosis el 70% de la población, y el 20 por ciento haya recibido ya las dos dosis.
La tercera fase ocurrirá cuando el 80 por ciento de los residentes hayan recibido su primera dosis de vacuna y el 25 por ciento hayan recibido su segunda dosis. Aquí se permitirán actividades en interiores donde no siempre se puede usar mascarillas.