OSCAR VIGIL / TORONTO /
Las elecciones provinciales ya pasaron, por lo que aparentemente la campaña política entre los partidos políticos debería ser cosa del pasado. Sin embargo, todo indica que tanto la lucha frontal, como también los ‘zancadillazos’, continúan en la legislatura de Ontario.
El gobierno conservador de Ontario elevó el número de asientos requeridos para alcanzar el estatus oficial de partido, meses después de la elección provincial que redujo considerablemente la bancada de los liberales en la legislatura.
El nuevo mínimo, que fue dado a conocer en el informe económico de otoño la semana pasada, será de un 10% en la legislatura, es decir de 12 bancadas, en lugar de las ocho que eran requeridas hasta antes del enuncio.
El líder del Partido Conservador en el parlamento provincial, Todd Smith, dijo que la decisión no es un asunto político, algo en lo que el resto de los partidos representados en la legislatura no comparten en lo más mínimo.
“Cuando vimos que la legislatura redujo su tamaño en 1999, la cantidad necesitada para el estatus oficial de partido también disminuyó. En las pasadas elecciones ese número aumentó de 107 a 124 escaños, pero la cantidad de asientos necesarios no varió, de modo que lo que estamos haciendo es aplicar de ahora en adelante el 10% a la cantidad de escaños”, explicó Smith.
Negó además que la decisión de la mayoría parlamentara haya estado destinada directamente a los liberales, que pasaron de ser partido gobernante a tener un asiento menos del requerido para poder tener estatus oficial de partido tras la elección de primavera.
Al caer por debajo de la cantidad requerida, pierden fondos para investigaciones, salarios para el personal administrativo y otros fines, y sólo pueden operar en la legislatura con un presupuesto mínimo.
Los liberales han solicitado al Partido Conservador concederles algunos beneficios, incluyendo fondos similares a los que recibió el NDP al perder el estatus oficial de partido en el 2003, y los cuales le fueron otorgados por el entonces Premier Dalton McGuinty.
El líder interino del Partido Liberal de Ontario, John Fraser, se quejó de que la decisión del gobierno es innecesariamente divisiva e irrespetuosa para el 1.1 millón de votantes liberales en la provincia.
“Esto es amenazador para la democracia al tiempo que es intimidante”, expresó Fraser.
Otros partidos de la oposición cuestionaron los motivos de los conservadores de hacer los cambios ahora, en lugar de esperar hasta la próxima elección provincial.
El Partido Verde, que también cayó por debajo de la cantidad requerida para el estatus oficial de partido, dijo que el gobierno conservador está tomando decisiones de tal forma que socavan la democracia.
“Ellos están actuando en favor de los intereses de su propio partido y no en favor de lo que es bueno para la democracia o del pueblo”, manifestó el líder del Partido Verde, Mike Schreiber. “Ocho escaños para calificar por el estatus oficial de partido es una regla razonable que existió antes de la elección provincial y el premier debería aceptarla”, dijo.
Todas estas acciones sin duda tienen mucho que ver con la perspectiva política de cara a las próximas elecciones provinciales, para las cuales, según las ultimas encuestas, todo indica que la tendencia del Partido Conservador es hacia la baja, y la del Partido Liberal hacia arriba.