En medio de la polémica, refugiados de todo el mundo celebraron su fiesta de verano en Toronto

OSCAR VIGIL / TORONTO /
En estos momentos de discusiones, desinformaciones y tiempos difíciles para los refugiados que están llegando a Canadá, y a pesar de las amenazas de lluvia del sábado 14 de Julio, se llevó a cabo de manera exitosa el festival de la diversidad en el centro comunitario FCJ Refugee Centre.

Una de las invitadas especiales para hablar con los refugiados y solicitantes de asilo fue la representante ante el parlamento federal por la zona de Davenport, Julie Dzerowicz, quien literalmente recorrió el lugar como que estaba en su propia casa. Y tiene razones sobradas para ello, dado que la casa donde funciona el FCJ Refugee Centre, en la zona de las calles Oakwood y St. Clair, perteneció a su abuela.

Así, para la diputada federal fue fácil mezclarse con poco más de 150 personas que se dieron cita al evento y pudieron saborear la sazón de deliciosos platillos de diferentes partes del mundo: puto, de Filipinas; zamozas, de la India; Shir Berenj o budín de arroz, de Afganistán; quesadillas y pupusas, de El Salvador; y dumplings del Tíbet, entre muchos otros.

La avenida de Glenhurst, que usualmente se caracteriza por su pasividad, vibró con la diversidad de colores, sabores y sonidos que caracterizaron la celebración del fin de semana. La representación artística no podía faltar y por el escenario desfilaron jóvenes talentos que deleitaron al público con su música y bailes.

Loly Rico, codirectora del Centro, se mostró satisfecha con la respuesta de la comunidad: “Esta es una celebración muy especial porque además de cumplir 27 años de caminar junto a la comunidad, fue una oportunidad para el reencuentro con mujeres que vivieron en la casa de refugio hace más de 15 años y ahora están aquí compartiendo con nosotros, celebrando nuestra comunidad”.

El evento, que tiene lugar cada año, tiene por objetivo celebrar la diversidad de las personas que residen en Canadá y la unificación de todas las comunidades en una sola voz.

La realización este evento se da en momentos en que el apoyo a los solicitantes de refugio está en la cuerda floja con los recientes anuncios del gobierno. Para los codirectores del FCJ, este tipo de actividades es crucial porque ahora más que nunca hay que unificar fuerzas, señalaron.