“Comercio directo”, la nueva modalidad que busca beneficiar a productores de América Latina

Firebat CoffeeOSCAR VIGIL / TORONTO /
Cualquiera podría pensar que es nada más un sueño, sin embargo, al ver los primeros resultados, queda claro que la idea de comprar café de buena calidad a precio justo a pequeños productores de América Latina, traerlo a Canadá, procesarlo, catarlo y venderlo en este mercado, es ya una realidad.

Gustavo Castelar es un joven emprendedor salvadoreño que un día decidió probar suerte con una idea que desde hacía años no lo dejaba dormir en paz: montar una empresa en Canadá que se dedicara a comprar café de buena calidad en los mercados de América Latina, a un buen precio para los pequeños caficultores, y venderlo en este país.

Así, creó “Firebat Coffee Canada Operations”, una pequeña empresa que se dedica a importar café de excelente calidad producido por pequeños caficultores en el sur del continente y venderlo en este mercado. Primero, molido y en paquetes, y en los próximos meses, ya servido en su “tostaduría” que está a punto de abrir al público.

“El proyecto Firebat Coffee es una propuesta de café de especialidad primero de El Salvador, que involucra una conexión con el origen y con los productores muy rara de encontrar. Nosotros compramos el café en verde, o en ‘oro’ como se le conoce en la industria, basado en su perfil de catación, por ende, la calidad va primero y es el factor que reconocemos en el productor. Ese café luego lo tostamos y comercializamos en Canadá”, explicó Castelar.

Agregó que una de las características especiales de su proyecto es que favorece fincas pequeñas de micro productores artesanales donde los procesos son manuales, pero las cuales son fincas con premios alcanzados de taza de excelencia.

“La ventaja para los productores de café que vuelcan sus fincas a ser specialty y a cultivar variedades arábicas de alta calidad es que pueden accesar a precios en una relación de compra directa de entre $2.50 y hasta $5.00 por libra, cuando el precio del café comercial comodity es de $1.60 por libra y oscila según la oferta mundial”, apuntó el empresario, dando paso al nuevo concepto de equidad que se está popularizando en diversos mercados: Comercio Directo.

“En una relación del Direct Trade se da una especie de alianza con el productor donde se trabaja por una calidad determinada y el productor cuenta con el comprador para llegar a la meta y el comprador confía en su productor para generar ese producto único. De allí que un comprador puede dar adelantos de pago, pueden pactar claramente los estándares, y son cafés que se compran por encima de los $2.50 por libra y hasta incluso $5 o más. El tradicional ‘fair trade’ por su parte es un sello al que aplican las cooperativas que sólo les garantiza un precio mínimo de $1.40 por libra, o si el mercado (Wall Street para café comercial) está por encima de ese límite, entonces les paga solo 10% más que el de mercado”, explicó.

En esa lógica, dijo que su proyecto busca beneficiar directamente a los pequeños caficultores del continente con un buen precio de compra a fin de que estos puedan continuar cultivando cafés de excelente calidad.

Castelar ilustró que el café que ellos importan viene empacado al vacío en empaques aluminizados que evitan el acceso de luz y de aire conservando su humedad por más de 12 meses invariable, y que el hecho que importan cantidades pequeñas hace que su rotación sea rápida. Luego lo tuestan aquí y lo empacan de una vez, en bolsas con válvulas especiales que evitan nuevamente que el grano tostado sufra estrés por calor, luz o aire.

Su proyecto es de importación, tueste, empaque y comercialización. “Pero más que eso, para nosotros es la creación y el manejo de un concepto. Toda la historia, el logo basado en los mayas que hacen eco de la región de Mesoamérica, y la magia de nuestra tierra en un producto de calidad Premium es lo que proponemos”.

Agregó que las degustaciones serán próximamente una realidad en la “tostaduría” que está a punto de abrir al público, dado que un eje vital es explicar y generar el acceso al café de especialidad que ha notado es mínimo acá en Canadá.

En relación a la aceptación que su proyecto ha tenido dijo que de momento ha sido muy buena, “¡el que lo prueba se vuelve cliente! Pero aun el volumen, debido a las barreras que existen y los intereses de las corporaciones en desinformar, es bajo, lo que hace que sea una tarea casi de puerta en puerta, en farmers market, y será un año duro, pero al ver la respuesta de quienes lo prueban nos motivamos”.

Agregó que actualmente la forma de adquirir el producto es comprando por internet en www.firebatcoffee.com, sin embargo, explicó que el gustosamente recibe personas en el local en Oakville, para ampliar información, local que muy pronto abrirá las puertas al público en general como una “tostaduría” de café, o bar de cafés donde los interesados podrán degustar las variedades de productos que estará importante de diversos países del continente.