REDACCIÓN / TORONTO /
El viernes 10 de junio, en uno de los salones del Emmanuel College, tuvo lugar otra de las instancias propiciadas por el Programa Vidas que Cuentan, que el colectivo Latin@s en Toronto está desarrollando como forma de promover el diálogo intergeneracional, el empoderamiento de las personas de edad y una mayor integración dentro de nuestra comunidad.
En esta nueva jornada de lo que se ha comenzado a conocer como “Café y conversación en la Universidad de Toronto”, el neuropsiquiatra chileno Luis Fornazzari charló con el público acerca de su experiencia de vida desde aquel 11 de setiembre de 1973 en que se produjo el golpe de Estado que terminó con el proceso de cambios impulsados por la Unidad Popular con el que tanto él como su esposa, en ese entonces dos jóvenes profesionales de la salud, estaban absolutamente identificados y comprometidos.
Las circunstancias abordadas, si bien referidas a las especiales circunstancias del entrevistado, no difieren sustancialmente de lo que las mujeres y hombres que conformaron las primeras oleadas de inmigrantes, exiliados y refugiados latinoamericanos debieron enfrentar y superar en base a sus esfuerzos personales y a la solidaridad de quienes les brindaron su apoyo.
Las vidas que cuentan
Quienes llegaron a Canadá en las décadas de los ’60 y los ’70, cuando la sociedad que los recibió aún no había abrazado el multiculturalismo y albergaba importantes bolsones de xenofobia y rechazo a las diferencias, debieron sobreponerse no sólo a un idioma y a idiosincrasias muy diferentes a las de sus culturas de origen, sino a situaciones de desigualdad y exclusión para las que no siempre estaban preparados.
En esta serie de charlas y conferencias, y en la ofrecida por el Dr. Luis Fornazzari en particular, el relato de cómo era la ciudad y su entramado social, el modo en que los recién llegados fueron adaptándose a ella al tiempo que contribuían a transformarla, el hacer conciencia acerca de los esfuerzos desarrollados en el campo del trabajo, en el estudio, en la conformación de redes de apoyo, información y solidaridad, busca contribuir a un mayor conocimiento y a una mayor valoración de las señas de identidad comunitarias y por consiguiente a un mayor empoderamiento y a la creación de herramientas necesarias para favorecer la inclusión y la integración en un pie de igualdad de las nuevas generaciones.
En esta oportunidad, también se abordó un tema que ha ido adquiriendo creciente interés: no pocos de quienes han emigrado, y en especial quienes han debido dejar sus países en contra de su voluntad, han soñado durante mucho tiempo –en algunos casos durante décadas- volver y recuperar lo que se añora como un “paraíso perdido”.
Sin embargo, llegado el momento y por diversas circunstancias, ese regreso de mujeres y hombres de edad que sin duda se han ganado su derecho a elegir dónde vivir, se frustra o se difiere hasta que ya no es posible. Y ese es un tema fundamental si se desea promover un diálogo intergeneracional que nos haga conocernos mejor como comunidad y valorarnos mejor como personas.
El Proyecto Vidas que Cuentan, de Latin@s en Toronto, parcialmente financiado por el Programa New Horizons for Seniors del Gobierno de Canadá, cuenta con el apoyo del Dpto. de Español y Portugués de la Universidad de Toronto, El Centro News, El Debate y seis organizaciones comunitarias.
Fotografías: colaboración de Gloria Castaño – Colectivo 65.