Medios impresos hispanos en Toronto, sin rumbo y sin futuro

GILBERTO ROGEL / TORONTO
Brindar información relevante, verídica, actual y pertinente a los intereses de sus audiencias; además de orientar, ofrecer análisis, juicios y opiniones sobre los temas que los ciudadanos deben saber o debatir sobre la vida pública, son las funciones principales de los medios de comunicación en cualquier país que se jacte de ser democrático, y

Entre los principales motivos de este aletargamiento mediático destacan la ausencia de personal profesionalmente formado; la percepción mercantilista de algunos propietarios; el desinterés de muchos lectores; la visión reducida de ciertos anunciantes; y, en especial, el avance tecnológico llamase Internet.

Como si fuese la tendencia común, muchas de las páginas de estos medios están rellenas de información tomada generalmente del Internet, en el argot periodístico corte y pega. En muchos otros casos se hace una traducción literal de las principales informaciones publicadas previamente por medios impresos en Inglés, obviamente se omiten algunos detalles y, por supuesto, la fuente original de publicación.

Revista Debate quiso profundizar sobre este tema algunas veces abordado pero muy pocas con un enfoque técnico. Para ello se realizó un ejercicio sencillo y a la vez revelador: de los cerca de 9 periódicos y 12 revistas que se imprimen en el Gran Área de Toronto, se tomó una muestra de 5 periódicos y 4 revistas, los cuales son considerados como más representativos o los más conocidos en la ciudad (ver tabla anexa).

Con la muestra seleccionada se efectuó un análisis cuantitativo y cualitativo sobre algunos criterios periodísticos elementales: cantidad de información, información producida por el mismo medio, información no propia (generalmente tomada de agencias informativas o del Internet), y páginas de publicidad.

Periodismo barato

El decano del periodismo impreso en Canadá es “Diario El Popular”, el cual, fundado hace 40 años, es el único medio de circulación diaria con un tiraje oficial arriba de los 15 mil ejemplares. Además, es el único periódico que es vendido, en particular en negocios hispanos y en muchos kioscos del subway en Toronto. El tema fuerte de El Popular es la información sobre los tópicos nacionales de Canadá y de criminalidad en Ontario, los cuales aparentemente son retomados de los medios ingleses y traducidos casi literalmente al español. No obstante, en El Popular también se puede encontrar un poco de información de la comunidad, aunque muy poca de índole estrictamente comunitario. En producción local abunda la farándula y el deporte, sobre todo el futbol de las ligas hispanas en la ciudad. El análisis hecho a El Popular muestra que de las páginas de producción propia el mayor porcentaje esta dedicado al área de la farándula local (ver tabla anexa).

El segundo medio es “Correo Canadiense”, el cual surgió en el año 2001 bajo la sombrilla de un conglomerado de medios étnicos. Oficialmente tiene un tiraje de 20 mil ejemplares cada semana, los que se distribuyen gratuitamente en el GTA y otras ciudades de la periferia. Correo Canadiense nació como un proyecto con tres ediciones semanales (lunes, miércoles y viernes)) con perspectiva de convertirse en periódico diario, sin embargo ha quedado diezmado a una edición semanal de 16 y hasta de 12 páginas. El fuerte de Correo Canadiense son la noticias locales, tanto comunitarias como de farándula y de deportes, de hecho, el análisis muestra que en las únicas cuatro páginas de producción propia con que cuenta su edición muestra, hay seis notas de tipo política/comunidad, dos de farándula y dos de deportes.

El periódico “El Centroamericano” fue fundado hace 3 años por una pequeña empresa de tipo familiar y es una publicación gratuita de corte semanal con cerca de 10 mil ejemplares, los que son distribuidos en el GTA y otras ciudades aledañas. La mayor parte de la información publicada por el periódico El Centroamericano es relacionada a temas originados en países de América Latina y la cual es producida por una conocida agencia de noticas. Posee muy poca o casi nula producción propia o local.

“América Latina” es un periódico que se define a sí mismo como comunitario, el cual fue fundado por una organización sin fines de lucro llamada Human Right Press. Su primera edición fue hace dos años y se distribuye de manera gratuita cada mes. No se pudo contar con la información pertinente sobre el número de ejemplares ni el área de cobertura. El fuerte del periódico América Latina son los análisis políticos y los temas de interés a los trabajadores, entiéndase sindicatos y movimientos de izquierda, y es de resaltar que es uno de los medios que más producción propia posee. No obstante, el problema más grave de dicha publicación es la baja calidad de muchos de sus artículos.

En relación con las revistas, la “Revista Latidos” destaca por ser una de las más difíciles de catalogar. Es una revista gratuita de tiraje trimestral con mucho énfasis en contenidos de tipo artísticos y culturales; sin embargo, en muchos casos estos elementos se vuelven incomprensibles para la mayoría de lectores con poca formación en los campos citados. Latidos publica sus artículos generalmente en español y su respectiva traducción en Ingles, y tiene prácticamente nula producción propia en el sentido estrictamente periodístico.

La “Revista La Guía” probablemente es una de las más conocidas en la ciudad, una revista gratuita de publicación mensual con marcado énfasis en la venta de espacios publicitarios. Casi por regla sus informaciones están relacionadas a eventos o actividades realizadas por sus anunciantes, o sea publi-periodismo. La poca información propia casi siempre está vinculada a eventos comunitarios o de sus anunciantes. Técnicamente La Guía se podría considerar una revista más cercana al tipo de publicaciones del espectáculo o del entrenamiento sin ningún tipo de contenido comunitario o de política local.

“Revista Abanico” es una revista gratuita de publicación bimensual, de circulación en el GTA y sus alrededores, la cual se centra en los temas light, es decir temas relacionados al mundo de la moda, la música, el espectáculo y el entretenimiento. Abanico es una revista dirigida específicamente hacia un público menos preocupado por los temas de importancia del país o de la ciudad.

La “Revista Opinión” puede ser considerada como la más pequeña entre las otras cuatro revistas seleccionadas; sin embargo se podría decir que posee la ventaja de ser la única que produce material periodístico propio sobre temas de interés político, ya sea en Toronto o en los países de América Latina, aunque mayormente basado en cables producidos por diferentes agencias de noticias. En el argot periodístico esta técnica se conoce como ‘refritar’ notas. Es una revista gratuita de publicación bimensual.

Para analizar el tema de los medios impresos hispanos conversamos con algunos de los editores de éstos, quienes se defienden de las críticas que pesan sobre sus cabezas en el sentido de la mala calidad periodística de sus producciones, y de que la publicidad define los temas en la media hispana en Toronto.

Susana Donan, editora del semanario El Centroamericano, reconoce que aún hay mucho por hacer en materia de periodismo impreso en Canadá, y explicó que en muchos casos algunas personas se aprovechan de la venta publicitaria en una lógica de que los medios deben subsistir de la voluntad del anunciante. Esta condición podría ser el motivo por el cual muchos medios prefieren contratar los servicios de una agencia que contratar personal con formación periodística.

Al respecto, Freddy Vélez, editor de El Correo Canadiense, admite que sin la pauta publicitaria no existirían medios, y es más, enfatiza que los grandes conglomerados mediáticos a nivel mundial también están realizando recortes por esta misma razón. “Nosotros no podemos ser la excepción, debemos conjuntar nuestros intereses, los de los lectores, junto a los de los anunciantes”, explica.

Una de las voces críticas sobre este tema es Cristian Eyzaguirre, Director del Periódico Orgullo Hispano, quien considera que la pauta publicitaria es importante para la subsistencia de cualquier medio, pero también advierte que “ciertos medios únicamente tratan de vender publicidad a base del culto a la personalidad, sin importarles aspectos éticos”.

Un largo camino a la profesionalización y al desarrollo

Resulta claro que muchos de los medios analizados, y otros de los que quedaron fuera, están haciendo esfuerzos interesantes por desarrollarse en este país; sin embargo, también es incuestionable que la calidad de muchos es mínima si se comparan con los grandes medios, y no necesariamente nos referimos al tipo de publicación ni a la cantidad de la pauta publicitaria.

Estamos hablando de contenidos informativos de calidad profesional, ya sea vinculados a temáticas como la deseada integración política latinoamericana, cohesión social de los migrantes latinos en Canadá, participación política en la vida Canadiense, y no quedarse a simples observadores de lo que los demás hacen u opinan.

De igual manera se puede apuntar que a la media hispana en Toronto le hace falta diversificarse en sus contenidos y no delimitarse al círculo de sus anunciantes y sus amistades; así también hace falta un esfuerzo de modernización tecnológica, quizás ese pueda ser el camino para lograr un mayor respaldo publicitario. Quizás aquí es válido el comentario que alguien cercano me dijo: “después de darle una mirada rápida a 4 o 5 medios impresos uno se queda con la sensación de haber leído varias noticias de  parches y no información de calidad”.

Freddy Vélez se une a este criterio y dice “aquí es necesario que la comunidad hispana madure, para que simultáneamente los medios también logren mayor madurez y profesionalismo”. Igual línea de pensamiento comparte Cristian Eyzaguirre al enfatizar que “todavía hay muchos nichos informativos en Toronto que no han sido explorados, lo único que hace falta es imaginación y creatividad”.

Y sí, todo indica que efectivamente falta imaginación y creatividad, así como también un verdadero compromiso periodístico de los propietarios de los medios para que la comunidad hispana pueda contar con periódicos y revistas de calidad.

El primer paso para ello podría ser sin duda cambiar la lógica de periodismo barato con que funcionan la mayoría de estos medios (con traducciones del inglés, con ‘corte y pega’ y con uso de agencias de noticias) y que pudieran servir como instrumentos de integración de los migrantes para conocer la política, la cultura y la importancia del nuevo país, y que empezaran a producir más localmente y de buena calidad.  Ese es el reto.

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