María Augimery y Diane Finley, enfrentadas por control de Downsview Park

POR FRANCISCO REYES* / TORONTO /
Las controversias en torno a la administración de Downsview Park, de Toronto, han aflorado de nuevo con las recientes declaraciones tanto de la concejal María Augimeri como de la ministra federal de Obras Pública Diane Finley.
El lunes de la semana pasada, Augimeri, quien representa al Distrito Electoral Municipal #9 de North York, y es a la vez gerente de la TTC, manifestó a la prensa su disgusto por la forma en que está siendo administrado el “primer parque nacional urbano” de Canadá, que “no merece la mala dirección, la indecisión y los esquemas secretos que ha recibido del gobierno federal”. En ese sentido, fue categórica y expresó que “ha llegado la hora de entregar Donwsview Park a la Ciudad de Toronto”.

Este lunes, la ministra federal de Obras Públicas Diane Finley manifestó su desacuerdo con la concejal de Toronto y mantuvo la posición de que “el gobierno federal no considerará transferir la responsabilidad de Donwsview al gobierno de la ciudad”.

Las partes envueltas en las controversias y que no logran ponerse de acuerdo son el Ministerio Federal de Obras Públicas, la Junta Municipal de Ontario, la Alcaldía de Toronto y la corporación gubernamental Canada Lands, Co., que tomó control de la reserva urbana en noviembre del 2012.

De acuerdo con informaciones que Augimeri dice haber obtenido de fuentes fidedignas, Canada Lands Co. ha reabierto el plan comercial de negociar con el sector privado la venta de una gran parte de las 232 hectáreas del parque para que se construyan dentro de su perímetro 10,000 unidades de viviendas privadas y, con el dinero de la venta, transformar en parque urbano el terreno restante.

Sin embargo, tras las declaraciones de Augimeri la semana pasada, el portavoz de la ministra Finley desmintió a la concejal aseverando que el Ministerio de Obras Públicas “no tiene intención de vender porciones de Downsview Park”.

Augimeri ha reiterado su desacuerdo con el supuesto plan de venta y de construcción de viviendas en terrenos de Downsview, exhortando al gobierno federal a detener la comercialización y que la administración del parque pase a mano de la Alcaldía de Toronto, que ha mostrado su interés de mantener el control absoluto de esa reserva urbana.

Según Augimeri, las autoridades federales han estado ocultando los planes. “Ellas (las autoridades de Ottawa) tienen una historia probada de ocultar la verdad”, aseveró la concejal, quien parece insinuar que la ministra Finley y sus colegas del gabinete federal sólo ven el signo de dólar en todo lo referente al parque. “¿Quién sabe lo que están tramando detrás del escenario?”, se preguntó.

Es indudable que Ottawa tiene supremacía sobre los terrenos de Downsview Park. Sin embargo, la posición de Finley ha sido vista por la prensa local como “mezcla letal de arrogancia e ignorancia”, dado que desconoce la verdadera historia que une a la Alcaldía de Toronto con ese parque urbano.

Los terrenos de Downsview pertenecieron hace décadas a las Fuerzas Armadas Canadienses. En ellos habían construido una base militar con una pista aérea y hangares para las actividades castrenses.

La Base Aérea de las fuerzas Canadienses (CBF) fue clausurada y trasladada a las inmediaciones de Berrie, Ontario, quedando sólo una pequeña guarnición encargada de vigilar ciertos laboratorios del Ministerio de Defensa Nacional, así como las operaciones del aeródromo, utilizado para pruebas de despegue y aterrizaje de aviones comerciales construidos por la empresa Bombardier en los hangares que aún están en pie.

En otros hangares funcionó hasta su cierre en noviembre del 2011 el Museo Canadiense Aéreo y Espacial que debido al incumplimiento con Canada Lands Co. fue cerrado y trasladado a terrenos del Aeropuerto Internacional Pearson de Missisauga, donde reabrirá en el 2015.

En una de las principales instalaciones funciona actualmente el Mercado de pulga más grande de Canadá y uno de productores agrícolas, que habrá de generar  mayores ingresos económicos a la ciudad cuando se inaugure la estación Sheppard West, a unos cinco minutos de ese local, haciendo el recorrido a pie.

Cuando se anunció la clausura del museo, Augimeri apeló a Ottawa para que asumiera la deuda y no fuera desmantelado, debido a su fácil acceso desde el centro de Toronto, tomando la línea del “subway” hasta la estación de Downsview.

Downsview Park ha sido escenario de eventos internacionales y religiosos, como fueron misa de la primera visita del papa Juan Pablo II a Canadá (1984) y la eucaristía de clausura del Día Mundial de la Juventud (2002).

También se celebran allí actividades culturales, como es el Festival Hispano Tony Reyes, así como numerosos eventos deportivos en los que están envueltas ligas de las comunidades deportivas hispano-canadienses.

Las disputas entre Augimeri y Finley, de ser prolongadas y no se llegue a resolver el problema de control del parque, podría afectar a muchas de las actividades que allí se desarrollan, si las autoridades federales mantienen su terquedad de no traspasar la administración de Donwnsview a su legítimo propietario: el gobierno de Toronto.

*Francisco Reyes es un periodista canadiense de origen dominicano. Puede ser contactado a reyesobrador@hotmail.com

Be the first to comment on "María Augimery y Diane Finley, enfrentadas por control de Downsview Park"

Leave a comment