
La inmigración a Canadá desde los Estados Unidos ha cambiado a través de la historia, hoy se espera el efecto “Trump”
POR OSCAR VIGIL / TORONTO /
Desde el año pasado, Canadá se ha preparado para una oleada de inmigrantes que se espera cruzarán la frontera desde Estados Unidos a medida que el presidente Donald Trump continúa la mayor campaña de deportaciones en la historia del país. Ya está sucediendo, aunque aún no en grandes cantidades.
Según Estadísticas Canadá, durante la última década la mayoría de los inmigrantes procedentes de Estados Unidos han sido ciudadanos no estadounidenses o estadounidenses que anteriormente vivieron aquí como residentes temporales, algo que contrasta con décadas anteriores, como la del 80, donde eran ciudadanos estadounidenses. Si bien esta proporción disminuyó en la década siguiente, se mantuvo por encima de dos tercios hasta principios de la década de 2010.
Investigaciones periodísticas muestran que desde entonces, la proporción de residentes estadounidenses no ciudadanos que inmigraron a Canadá aumentó considerablemente desde principios de la década de 2010, alcanzando el 45% (o 9,307) en 2019, el año anterior a la pandemia de COVID-19. Este grupo incluye residentes legales e indocumentados en el país.
Mientras tanto, la proporción de ciudadanos estadounidenses que anteriormente contaban con permisos temporales en Canadá también aumentó significativamente durante este período, alcanzando un máximo del 54 % (6,454) en 2017 y fluctuando en los años posteriores.
“Como resultado de estos cambios, la mayoría de los inmigrantes estadounidenses en Canadá en los últimos años han sido residentes no ciudadanos estadounidenses o ciudadanos estadounidenses que ya vivían en Canadá”, señala el informe “Tendencias recientes en los flujos migratorios de Estados Unidos a Canadá”.
La migración estadounidense a Canadá ha fluctuado desde su pico a mediados de la década de 1970, tras el fin de la guerra de Vietnam. Sin embargo, las entradas anteriores a principios de la década de 2000 se habían mantenido bajas y estaban más alineadas con las condiciones económicas de ambos países.
Pero luego, el número de residentes estadounidenses no ciudadanos que obtuvieron la residencia permanente en Canadá se cuadriplicó de 2,100 en 2016 a 9,310 en 2019, mientras que el número de ciudadanos estadounidenses que pasaron de la residencia temporal a la permanente aumentó de 5,637 a 6,557.
El informe atribuyó este cambio en parte a las políticas restrictivas de inmigración de Estados Unidos implementadas por el presidente Donald Trump durante su primer mandato, como los límites de visas, los retrasos en la obtención de tarjetas de residencia permanente basadas en el empleo y el mayor riesgo de deportación.
Ahora la historia se comienza a repetir y con expectativa de números mas altos. Durante las últimas semanas, la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) ha dado a conocer la detención de decenas de personas que cruzaban ilegalmente la frontera estadounidense hacia Canadá en diferentes zonas del país.
Los números de este año aún no están consolidados, pero los datos oficiales muestran que la RCMP interceptó a 1,302 personas que cruzaban la frontera ilegalmente hacia Canadá el año pasado, principalmente hacia Columbia Británica y Quebec. Y las autoridades fronterizas canadienses informaron también que el año pasado detuvieron a casi 34,000 extranjeros en todos los cruces terrestres con Estados Unidos, a quienes consideraban “inadmisibles”, lo que representa un aumento de aproximadamente el 30 % con respecto a 2023.
En diciembre, el entonces primer ministro Justin Trudeau prometió destinar más de mil millones de dólares a la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA) y la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) para mejorar la protección de la frontera, y el mes pasado, los primeros ministros provinciales comprometieron refuerzos policiales adicionales para abordar el problema. Algunas de las medidas incluyen el alquiler de dos sofisticados helicópteros Black Hawk para patrullar toda la frontera desde bases en Ottawa y Manitoba, y la compra de más drones.